La represión en Cuba II

De aquellos calabozos de Esteban Ventura Novo, el sádico oficial de la policía de Batista, no queda ni la sombra, de aquel tenebroso sótano donde la tortura y el crimen eran cosa habitual, no queda nada, aquella antesala del infierno donde tanto joven fue martirizado hasta la muerte, muchas veces por el único delito de ser joven, desapareció para siempre.

En aquel lugar de muerte hoy usted se encuentra a estudiantes universitarios que tienen allí entrada libre, que van a esos calabozos, hoy iluminados, ventilados, donde no se mata, ni se tortura, ni se golpea a un prisionero, esos estudiantes asisten allí libremente, cuando quieren, a ayudar en el mejoramiento de nuestras Estaciones de Policía, junto a los demás miembros de la comunidad en un hermoso e inédito proyecto. Esa es Cuba, esa es la Cuba de hoy, esa que no hay calumnia que la empañe, ni difamación que la dañe, porque su moral y su ética están por encima, muy por encima de la cobardía de sus adversarios.

Estaciones de la Policía Nacional Revolucionaria dirigidas por maestros, profesores graduados de universidades pedagógicas, devenidos en jefes de esas unidades, Estaciones dirigidas por mujeres, madres y esposas ejemplares, dirigidas por jóvenes graduados de nuestros institutos del MININT, donde usted, simple vecino, puede opinar, decir, sugerir como debe funcionar mejor el trabajo de la PNR, como debe ser la Estación de Policía de su municipio, donde usted, simple ciudadano es escuchado las 24 horas del día. ESA ES LA CUBA DE HOY, la que defendemos con la vida la mayoría de los cubanos, esas son las razones de Cuba.

Autor: Raúl Antonio Capote

El adversario cubano, comprometido con la verdad, la justicia y mi Patria Grande.